Las sabanas del Cerrado, que constituyen el 62% de la vegetación del bioma, fueron responsables de la emisión de 88 millones de toneladas de CO2, es decir, el 65% del total registrado.
La operación se lleva a cabo simultáneamente en todos los diecisietes estados donde está presente este importante bioma.
La pérdida de vegetación nativa en los biomas brasileños tiende a tener un impacto negativo en la dinámica climática regional y reduce el efecto protector durante los fenómenos meteorológicos extremos
Los datos muestran que la disminución de la deforestación se produjo en toda la región, incluso en los cuatro estados considerados más críticos por delitos ambientales: Pará, Mato Grosso, Amazonas y Rondônia; y en todas las categorías de tierras.
La extensión deforestada en la zona rural de Altamira, estado de Pará, en el corazón de la Amazonia Legal, equivale a más de 15 mil campos de fútbol.